Seguramente favorecidos por la alta densidad en la población de cangrejos de río en el humedal de Salburua, los somormujos lavancos residentes en el mismo se han especializado en su captura, disciplina esta en la que muestran una enorme destreza.
Dependiendo del tamaño del cangrejo capturado, son capaces de tragárselos enteros o bien recurren a desmembrar sus extremidades realizando fuertes zarandeos sobre ellos o ejecutando enérgicos lanzamientos de los cangrejos contra el agua, de esta manera una vez el cangrejo haya perdido alguno de sus miembros, resultan mas fáciles de ingerir.
En las fotos siguientes podemos ver algunas escenas que documentan lo anteriormente descrito.
Impresionantes Julio. (Gonzalo)
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